No soy una autoridad en el tema y lo que te diga en éste blog no debe ser tomado como una guía o solución para asuntos románticos o de pareja. Sólo deseo compartirte algunos señalamientos e impresiones sobre lo que -según mis propias experiencias- yo he aprendido o entendido en cuestiones amorosas. No sé si será interesante o divertido, sí sé que será real.
Quiero iniciar diciendo:
Pero ¿quien chingaos le hizo pensar a la humanidad que el poliamor funciona bien para las mujeres? (Si eres hombre y tampoco te funciona bien la práctica del poliamor, cuéntame, porque me parece que serías una aguja en un pajar)
#quenadieseofenda pero… según Lolita, o sea yo, no hay estado emocional (al menos del género femenino) que se mantenga saludable mientras amas a tú pareja y la sabes con otra persona diciéndole las mismas cosas que te dice a tí; sospecho que ningún estado emocional se mantiene saludable mientras amas a tu pareja y te ves siendo aplazada por ella o ubicada en un “turno” o teniendo que esforzarte por recibir la misma atención que tú le das.
No puedo entrar en discernimientos de personalidad o circunstancias, a lo que yo voy es a que entendamos qué es el poliamor. Es una decisión. Y mientras las partes de esos triángulos o rectángulos ¡o círculos viciosos! sepan y acepten su naturaleza es probable que se adapten sin conflictos radicales, dramáticos, agresivos o hasta violentos.
Pero si lo que escribí en líneas anteriores te genera una sensación de identificación, probablemente te encuentras en una relación poliamorosa y no estás consciente de ello.
No estoy juzgando la práctica, no me corresponde y cada cabeza es un mundo. Lo que estoy diciendo es que YO, a nivel personal, estoy en contra del #poliamor porque carezco de las habilidades emocionales que se requieren para relacionarme de esa manera.
¿Estás en desacuerdo o en contra del poliamor también? O ¿crees que también ocurre que sea cuestión de solo contar con una autoestima firme o de temperamento sereno?
El problema radica en que -según yo- teniendo la mayor templanza y la autoestima de hierro, los seres humanos estamos expuestos y vulnerables a atravesar altibajos y una cosa es cómo reaccionas ante los demás y otra que -aún guardando una aparente calma y diplomacia ante situaciones adversas de cualquier tipo- tu cuerpo y tu ser reaccionen o respondan de forma saludable o sana. Y siendo sincera, no creo que haya un ser humano incólume mientras está aún abierto a experimentar el amor de pareja.
Hay mucho que decir acerca de éste tema y te aseguro ¡lo diré!
Quiero recalcar que para mí las relaciones no tienen que ser iguales para todos y que la forma en la que cada pareja o trío o grupo sostenga sus relaciones no me incumbe, todas me parecen respetables si para los involucrados así lo son (NADIE NUNCA debe opinar nada sobre una relación de pareja ya que nadie nunca puede saber los detalles como la pareja misma), sin embargo, lo que vas a leer en éste blog es lo que me afecta a mí: lo que yo NO acepto para MÍ; lo que me parece relevante a MÍ. No significa que sea lo idóneo para toda la gente. Pero si te identificas, cuéntame todo lo que piensas.
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